CFA advierte que desvío histórico respecto de la meta de déficit estructural requiere consolidación fiscal realista, pero exigente
El organismo publicó un informe en el que analiza los factores que incidieron en el desvío y en que la meta para 2021 enfrentara sucesivas recalibraciones.
El Consejo Fiscal Autónomo (CFA) publicó hoy 22 de marzo un informe sobre desviaciones de las metas de Balance Estructural (BE), regla que permite determinar el nivel de gasto público para cada año.
Así, el CFA analizó -en el marco de su función legal- el cumplimiento de las metas fiscales y los factores que explican sus recientes desviaciones. Además, hizo recomendaciones para asegurar una convergencia fiscal compaMble con la sostenibilidad de las finanzas públicas.
En concreto, el déficit estructural se ubicó en 11,4% del PIB, según lo registrado por la Dirección de Presupuestos (Dipres) en el Informe de Finanzas Públicas del cuarto trimestre de 2021, superando la meta planteada por el Gobierno para 2021 de un déficit estructural de 4,7% del PIB1. Estas cifras deberán ser actualizadas por la Dipres con las nuevas Cuentas Nacionales publicadas por el Banco Central el 18 de marzo de 2022. Sin embargo, de acuerdo al CFA, esta actualización presenta diferencias acotadas, por lo que el análisis y recomendaciones de este informe no cambiarán mayormente.
“El déficit estructural alcanzado en 2021 (11,4% del PIB) representa el desvío más elevado respecto a la meta desde que existe la regla de Balance Estructural (instaurada en 2001), así como el mayor déficit estructural como porcentaje del PIB”, dice el Consejo en su informe.
Cabe notar que la meta para 2021 fue modificada en dos ocasiones. Así, ante la crisis social de fines de 2019 el gobierno implementó un plan de protección del empleo y recuperación económica, que implicó un primer ajuste de las metas. En este contexto, la autoridad invocó una cláusula de escape de facto, que implicó que para 2021 la meta pasara de un déficit estructural de 1,2% del PIB a 2,5% del PIB.
Luego, según plantea el Consejo, ante el impacto del Covid-19 en la actividad económica, en el empleo y en los ingresos de la población, surgió la necesidad de desMnar recursos extraordinarios para hacer frente a la emergencia. Así, el 14 de junio de 2020 el Poder EjecuMvo y el Congreso suscribieron un "Marco de Entendimiento para un Plan de Emergencia por la Protección de los Ingresos de las Familias y la ReacMvación Económica y del Empleo", el que definió un espacio de gasto adicional por US$12.000 millones, en un plazo de 24 meses, para enfrentar la pandemia. Esto implicó una nueva recalibración
-mediante decreto- de las metas estructurales en sepMembre de 2020, con lo que la meta para 2021 pasó de un déficit estructural de 2,5% del PIB a 4,7% del PIB.
Finalmente, al cierre del ejercicio 2021, la meta así recalibrada no fue cumplida, verificándose un déficit estructural de 11,4% del PIB, explicado principalmente por medidas de gastos adicionales para hacer frente a la pandemia y sus efectos. En este escenario, el Consejo reitera una serie de recomendaciones para enfrentar los desvíos de las metas y conMnuar con una senda de convergencia que permita asegurar la sostenibilidad de las finanzas públicas en el mediano y largo plazo.