CFA califica como preocupante el desvío de la meta de BE en 2024 y llama a presentar a la brevedad medidas adicionales de ajuste de gasto

Jueves, febrero 20, 2025

El déficit estructural de 3,2% del PIB de 2024 es un desvío de magnitud extraordinaria para un año sin crisis, que implica un desvío de 1,3 puntos del PIB por sobre la meta de déficit de 1,9% fijada por el gobierno.

A juicio del CFA, este desvío deteriora la situación de estrés fiscal actual, dificulta la convergencia hacia un BE de equilibrio que permita estabilizar la deuda bruta, y envía una señal desfavorable sobre el compromiso o la capacidad del gobierno para cumplir con las metas fiscales.

Ante este incumplimiento y las proyecciones de la Dipres de un nuevo desvío en 2025, el CFA presentó propuestas de medidas de mitigación de corto plazo.

Como preocupante calificó el Consejo Fiscal Autónomo (CFA) el resultado del Balance Estructural (BE) en 2024 que, de acuerdo con lo informado por la Dirección de Presupuestos (Dipres), alcanzó un déficit de 3,2% del PIB, lo que implica un desvío de 1,3 puntos del PIB respecto de la meta de -1,9% fijada en el Decreto de Política Fiscal. 

El Consejo explicó que este resultado es preocupante principalmente por tres razones: primero, se trata de un desvío de magnitud extraordinaria que acentúa aún más la situación de estrés fiscal actual, que el Consejo ha advertido previamente. Para tener un orden de magnitud, el desvío de la meta de BE en 2024 supera los promedios históricos de desviaciones del período 2001-2023 en años sin crisis ni eventos extraordinarios, respecto a las metas de los decretos originales (en 0,6 pp) y a las metas de los decretos modificados (1,1 pp).

Segundo, dificulta la convergencia hacia un BE de equilibrio, necesario para estabilizar la deuda bruta por debajo de su nivel prudente de 45% del PIB y, más aún, hacia un BE superavitario que permita reconstruir los ahorros fiscales en el mediano plazo, en especial del Fondo de Estabilización Económica y Social (FEES), para estar mejor preparados ante futuras crisis.

Y tercero, porque este incumplimiento envía una señal desfavorable sobre el compromiso y/o la capacidad del gobierno para cumplir con las metas fiscales y puede erosionar la credibilidad en la regla fiscal.

Ante este escenario, el CFA hizo un llamado al Ministerio de Hacienda a presentar a la brevedad medidas adicionales de ajuste de gasto para 2025, para así cumplir con la meta estructural del presente año y estabilizar la deuda pública.

El Consejo precisó que el ajuste para 2025 ya anunciado por la Dipres, de 0,2 puntos del PIB (US$635 millones) resulta insuficiente, y que se requiere un ajuste adicional de al menos 0,5% del PIB (US$1.554 millones), aunque este monto podría cambiar, ya que las proyecciones de ingresos podrían modificarse con la mejora en los modelos de estimación que la Dipres se comprometió implementar. Por lo tanto, a juicio del CFA, la Dipres debe monitorear constantemente dichas proyecciones y realizar oportunamente los ajustes de gasto que sean necesarios para cumplir la meta de BE. 

El CFA agregó que retomar el cumplimiento de las metas fiscales plantea un desafío relevante para la credibilidad de la política fiscal, a la vez que, de repetirse estas desviaciones, llevarían a superar el nivel prudente de deuda en pocos años. Hasta el momento, la deuda bruta del gobierno central se ha mantenido por debajo del nivel prudente de 45% del PIB. Sin embargo, en 2024 superó la estimación inicial de Dipres de 41,1%, llegando a 42,3% del PIB, lo que implica 2,9 pp del PIB más que en 2023.

Las cifras de 2024

El incumplimiento de la meta de BE en 2024 se debe a una combinación de menores ingresos fiscales respecto de lo presupuestado y a un ajuste insuficiente del gasto público. En particular, los ingresos efectivos fueron inferiores en US$4.299 millones a lo proyectado en la Ley de Presupuestos inicial (lo que en términos de ingresos estructurales implica menores ingresos por US$5.142 millones), debido principalmente a una menor recaudación tributaria y de ingresos por litio. Aunque el gobierno implementó un ajuste del gasto de US$800 millones, este resultó insuficiente para cumplir la meta de BE y, además, recayó sobre el gasto de capital, habiéndose requerido un ajuste adicional de US$4.342 millones. 

Medidas de mitigación para 2025

El CFA recomendó medidas de mitigación para el corto plazo, complementarias con una agenda de mediano plazo que el Consejo ha presentado en informes anteriores y que continuará abordando. Estas acciones abordan i) ajustes de gasto público, ii) optimización de modelos de proyección de ingresos fiscales, y iii) mejoras en la contabilidad y transparencia fiscal.

En particular, el Consejo llama a cumplir, al menos, estrictamente con la meta de BE de -1,1% del PIB en 2025; realizar ajustes adicionales al gasto en 2025 para alcanzar dicha meta; adelantar el trabajo en la planificación e implementación de los ajustes fiscales para 2025; obtener ganancias de eficiencia permanentes del gasto que generen mayor espacio fiscal; evitar que el ajuste fiscal recaiga principalmente en el gasto de capital, dada su incidencia en el crecimiento económico; preparar anticipadamente un plan de ajuste del gasto público exigente a mediano plazo; optimizar los modelos de proyección de ingresos por parte de la Dipres; sistematizar y publicar los criterios para clasificar qué transacciones financieras se registran como inversión o desinversión y cuáles como ingreso o gasto; evaluar posibles cambios a la metodología de cálculo del BE en cuanto al tratamiento futuro de los ajustes por medidas tributarias transitorias; y avanzar en la transparencia de las estadísticas fiscales, en el sentido de publicar información sobre otros pasivos relevantes.