CFA destaca que reducción del déficit estructural en 2022 es compatible con convergencia y sostenibilidad fiscal
La estimación realizada por la Dirección de Presupuestos, correspondiente a una reducción de 2 puntos porcentuales del PIB del déficit estructural respecto de la meta para 2022, se explica principalmente por una mayor recaudación que la esperada en la reciente Operación Renta. El CFA recalca que este sobrecumplimiento corresponde a una gestión prudente de riesgos, ya que dichos ingresos “no necesariamente deben ser considerados como permanentes”.
El Consejo Fiscal Autónomo (CFA) publicó hoy su informe N° 12 de Evaluación y Monitoreo al Cálculo del Ajuste Cíclico de los Ingresos Efectivos. En este documento, el CFA realiza un análisis de los datos y proyecciones del periodo 2022-2026 contenidos en el Informe de Finanzas Públicas (IFP) del segundo trimestre de 2022, elaborado por la Dirección de Presupuestos (Dipres).
En el documento, de 28 páginas, el Consejo -que tiene como mandato contribuir al manejo responsable de la política fiscal del Gobierno Central- verifica que la metodología y los procedimientos utilizados para el cálculo del ajuste cíclico de los ingresos efectivos para 2022 se ajustan a las normas, a las variables efectivas calculadas por la Dipres y a las elasticidades, de acuerdo al reglamento del Balance Estructural (BE). También verifica que se aplicó correctamente la metodología del ajuste cíclico para el mediano plazo (2023-2026).
En su informe, además, el CFA realiza un análisis del Balance Estructural que proyectó la Dipres para 2022, de un déficit de 1,3% del PIB, y destaca que esta cifra “esté en línea con el inicio de una senda de convergencia compatible con la sostenibilidad fiscal”. El Consejo destaca que la estimación para el déficit estructural de este año es menor al que se proyectó en el IFP del primer trimestre de 2022, de 3,3% del PIB, el que ya era menor que el déficit de 2021, de 10,7% del PIB. Consistentemente, se proyecta que el gasto para 2022 caiga 24,1% real respecto a 2021, marcando así el inicio de la senda de convergencia.
Sin embargo, el organismo que preside Jorge Rodríguez enfatiza que el mencionado sobrecumplimiento de la meta de déficit estructural de 2022 se debe, en gran parte, a los ingresos fiscales adicionales que provienen principalmente de un aumento no previsto de la recaudación en la Operación Renta y del Impuesto Sustitutivo de Rentas Acumuladas en el Fondo de Utilidades Tributables (ISFUT). “En este sentido, si bien existe una mejora en los ingresos estructurales proyectados para 2022 -desde 20% del PIB a 22,8% del PIB-, estos no necesariamente deben ser considerados como ingresos permanentes”, dice el documento, debido a que la metodología del Balance Estructural sólo ajusta los ingresos fiscales por los efectos cíclicos asociados al PIB y al precio del cobre, pero no por otro tipo de ingresos transitorios.
Así, considerando la naturaleza extraordinaria de estos ingresos, el Consejo “valora el sobrecumplimiento de la meta de déficit estructural establecida para este año”. Esto, asegura el CFA en su informe, “da cuenta de una adecuada gestión de riesgos por parte de la autoridad fiscal”.
De hecho, el Consejo también llama a interpretar con cautela el cálculo de los ingresos estructurales, pues se basan en una brecha negativa del producto para 2022 de 1,9 puntos (diferencia porcentual entre el PIB efectivo y el PIB tendencial). Al respecto, plantea que una brecha negativa no es consistente con la alta inflación y el elevado déficit de cuenta corriente existentes, que llevarían a pensar en una brecha del producto positiva.
En relación a que el IFP de la Dipres del segundo trimestre de 2022 es el primero que se publica tras la incorporación de un nivel prudente de deuda en el decreto de política fiscal, el CFA valora que las proyecciones de mediano plazo muestren que la deuda bruta se ubique por debajo del umbral de 45% del PIB hacia el final del horizonte de proyección (2026). Al respecto, el Consejo destaca que “la implementación de una regla dual es un paso significativo en el fortalecimiento del marco institucional de la política fiscal del país, en línea con recomendaciones previas planteadas por el CFA”.
Finalmente, sobre los escenarios macroeconómicos alternativos elaborados por la Dipres en el Informe de Finanzas Públicas, el Consejo valora su inclusión, pero recomienda que a futuro estos consideren diferencias más relevantes en las variables claves respecto al escenario base. Para visualizar escenarios de riesgo “sería más informativo utilizar escenarios con valores más extremos de las variables claves como el PIB, el precio del cobre y el tipo de cambio, que incide directamente en las estimaciones realizadas por la autoridad fiscal”, se plantea en el informe.